ADVERTENCIA: No se recomienda el uso de la planta descrita en este texto a los practicantes de la meditación activa en su Mantra Personal. El uso de esta planta es observado apenas por los devotos Naga Baba del Señor Shiva.
“Uno debe simplemente seguir las instrucciones del Señor y de Sus sirvientes empoderados. Esas instrucciones son buenas para todos y una persona inteligente va a seguirla. Pero uno no debe intentar imitar las acciones del Señor y de Sus sirvientes. Uno no debe beber el océano de veneno e imitar a Shiva, pues eso resultaría en su propia muerte.” (Om Bhagavad Gita)
EL SEÑOR DEL BHANG
Según cuenta la historia, Shiva se enfureció con su familia y se fue a dar una vuelta por la Tierra sin rumbo fijo. Agotado por el calor del sol se cobijó a la sombra fresca de una alta planta de cannabis y finalmente se quedó dormido. Curioseando probó sus hojas y sintió que le refrescaban, así que lo adoptó como comida favorita. El dios Shiva trajo el cannabis desde el Himalaya para que los hombres tuvieran felicidad y conocimiento para que lo usaran y disfrutaran.
SHIVA LO TOMA COMO BEBIDA
A partir de entonces a Shiva se le llamará Señor del Bhang. Shiva bebió bhang, un refresco líquido apacible, hervido de hojas con almendras, ocho especias, cogollos, leche, amapola y azúcar. Otros investigadores aseguran que el bhang estaba hecho con cogollos aplastados, leche, agua, miel o azúcar, pimienta negra y algunas otras semillas o hierbas hervidas juntas.
EFECTOS DESCRITOS POR LAS CIVILIZACIONES ANTIGUAS
El bhang purifica y limpia el alma, traen visiones de prosperidad a aquellos que lo beben, asusta a los malos espíritus y aleja los malos pensamientos. Cura la disentería e insolación, vivifica la digestión, afila el apetito, refresca el intelecto, da vigilancia al cuerpo y alegría a la mente, prolonga la vida, es un buen aperitivo, vivifica la imaginación y ahonda el pensamiento.
LA CIENCIA Y EL BHANG
La Cannabis sativa es una especie herbácea con propiedades psicoactivas. Es una antigua hierba originaria de las cordilleras de los Himalayas. Sus usos van desde la aplicación textil o alimentaria en el caso de las variedades sin contenido de THC, hasta como sustancia psicoactiva en las variedades bajo los nombres de marihuana, o hachís – su resina procesada. Debido a sus propiedades psicoactivas, es una de las pocas plantas cuyo cultivo se ha prohibido o restringido en muchos países. Marihuana es un término genérico empleado para denominar a los cogollos de ésta planta, que son su órgano reproductivo femenino, y al hachís, polen prensado de la flor, que contiene las concentraciones más altas del tetrahidrocannabinol, el THC.
Las plantas de marijuana son de dos tipos: masculina y femenina. Las masculinas producen polen que polinizan las flores de la planta femenina. Cuando esas flores de la planta femenina son polarizadas surgen las semillas. Aun que las plantas femeninas no sean polarizadas ellas producirán el THC.
MARIJUANA MEDICINAL
Es empleada, en su forma natural, para el tratamiento del glaucoma, asma, cáncer, migraña, insomnio, náuseas y vómitos asociados a la quimioterapia anticancerosa, esckerisis múltiple, molestias ocasionadas por neuropatías periféricas y demás padecimientos neuromusculares. El delta-9-THC se fabrica también de forma sintética como fármaco llamado dronabinol. Los porcentajes de canabinoles determinan la manera en que cada planta influye en el cerebro humano.
LEGALIDAD
El uso de la cannabis con fines recreativos es prohibido en casi todos los países, pero el uso medicinal del cannabis es legal en un número limitado de territorios en todo el mundo, entre ellos: Argentina, México, Canadá, Alemania, Austria, Holanda, España, Israel, Finlandia y Portugal. En Estados Unidos, catorce estados han reconocido la marihuana medicinal: Alaska, California, Colorado, Hawai, Illinois, Maine, Michigan, Montana, Nevada, Nuevo México, Oregon, Rhode Island, Vermont y Washington.
Por esa y otras razones, una vez más, expresamos que el uso de esa planta no es recomendado a los practicantes de meditación en el Mantra Personal.