En una oportunidad, Madre Parvati y el Señor Shiva conversaban acerca del matrimonio de sus dos hijos. Escuchando la conversación, Ganesha y Karttikeya se presentaron ante sus padres y exclamaron a la vez: “Yo quiero casarme primero”. Madre Parvati les dijo entonces: “Muy bien, pero con una condición: aquel que dé la vuelta al mundo y regrese primero, se casará primero”. Cuando Karttikeya, el hemano menor de Ganesha escuchó la condición, saltó de inmediato sobre su pavo real e inició su travesía alrededor del mundo. Mientras tanto, Ganesha pensaba en su desafortunada condición. Era de baja estatura, sus piernas eran cortas, tenía una barriga prominente y un ratón como vehículo.
Después de reflexionar durante algún tiempo, trajo dos almohadones y le pidió a sus padres que por favor se sentaran frente a Él. Después de ofrecerles los debidos respetos, saltó sobre su ratón, dio siete vueltas alrededor de sus padres y dijo:
-“Madre, no sólo le di la vuelta al mundo una vez, sino siete veces. Ahora, por favor haz los arreglos para mi matrimonio”.
-“¿Cómo es posible que fueras alrededor del mundo siete veces? Preguntó Parvati.
-“Acabo de hacerlo, madre”, dijo Ganesha.
-“¿Atravesaste las grandes montañas, los continentes y los océanos?” Preguntó su madre.
-“¡Sí, mi querida madre!” Contestó Ganesha. “¡Son tan majestuosos, que aún me extasío recordando su belleza”.
Mientras tanto Kartikeya apareció en escena y dijo:
“¡Pero no te vi salir del Monte Kailash!”
-“¡Eso es cierto! Mi hijo Karttikeya tiene razón. Tú no dejaste nuestra presencia ni por un instante”, dijo Madre Parvati.
-“¡Sí lo hice! Me despedí de mi padre, le di la vuelta al mundo tranquilamente y lo pasé de maravillas”.
-“¡Pero sólo te vi dar vueltas alrededor de nosotros montado sobre tu ratón!”